Mi masa madre bebé, que reposa tranquila en la encimera de la cocina, parece que recupera su actividad. Ayer le quité la capa de arriba al comprobar que empezaba a tener algo de moho y después la removí un poco con una cuchara.
Hace un momento, a través de la base del bol, he podido apreciar que se ha generalizado la aparición de alveolitos y, levantando el ya famoso gorrito de ducha, parece que mi masita quiere recuperar su aroma acidillo. ¡¡Bien!! Creo que poner la calefacción en casa la ha ayudado bastante.
Espero que mañana los alveolitos sean alveolos de un tamaño que responda a mis expectativas y a las explicaciones de Bea en Babette y, por fin, pueda volver a refrescarla. Ya faltará menos para poder hacer pan con ella.