Ya hace dos semanas que compré un montón de buenos panes en Madre Hizo Pan. Desde entonces tenía pendiente escribir una entradilla pero no encontraba el momento… Ha sido hace 20 minutos, al sacar la última rebanada de su pan de maíz del congelador, cuando he decidido que tenía que ser ahora o nunca.
No siempre es fácil encontrar buen pan en Madrid y alrededores, pan hecho con buenos ingredientes, arte, paciencia y cariño. Y tampoco es fácil que cuando en una panadería dices que escribes un blog de pan, alguien se entretenga en explicarte el cómo y el porqué de sus panes e incluso que te deje hacer fotos en el local. En fin… Son de esos sinsentidos con los que nos sorprende la vida en negativo pero que en Madre hizo Pan no se cumplieron.
Compré muchos y muy diferentes panes: un hermoso payés, un multisemillas, un bollaco con masa de roscón, uno de maíz y pasas y otro que no consigo recordar.
El payés casi desapareció en el día junto a una tortilla de patatas y unos boquerones rebozados, al lado de La Granja y resulto ser un acompañante redondo ;-) El bollaco también duró poco, lo empezamos como postre de nuestra comida campera y lo acabamos en el desayuno del día siguiente y, saboreándolo, tuve una visión: Me visualicé en Madre hizo Pan comprando nuestros próximos roscones de reyes.
El multisemillas y el de maíz acabaron en rebanadas en nuestro congelador, dispuestos a servirnos como desayuno y cumplieron sobradamente con su tarea pero, he de decir, que esta última hogazita, la de maíz, ha sido una auténtica revelación, con su miga de color amarillo suave, sus pasas y unos pedacitos mínimos de semillas que no logré identificar. ¡Estaba deliciosa!
Quiero dar las gracias a thespanishfood.es por el artículo que escribieron sobre Madre Hizo Pan y al que os he redirigido con el link del primer párrafo. Cuando alguien escribe algo tan extenso y meticuloso considero que es una pérdida de tiempo reescribir la misma información, me parece más sensato compartirla y ya.